En una noche con niebla y con el camino embarrado, Camilla Ferrand se dirige a la casa familiar a ver a su abuelo, cuando se encuentra con Benedict Wincross ¿un secuestrador?, ¿un ladrón? o ¿la solución a sus problemas?
Benedict, mientras lleva a cabo una investigación se topa con Camilla ¿una metomentodo?, ¿una arpía? o ¿la solución a sus problemas?
Camilla, la protagonista de este libro, es una joven que no quiere depender de un marido que la controle. Es temeraria, inteligente e independiente. Su abuelo, ya mayor y enfermo, se preocupa por su bienestar y quiere que se case. Nuestra protagonista ante la preocupación por su salud se inventa un inexistente prometido.
Benedict, exmilitar y Lord por casualidad; es un hombre marcado por la traición de una mujer, por lo que no quiere saber nada del matrimonio. En el momento en el que conoce a Camilla se encuentra inmerso en una misión, descubrir quien está saboteando la red de espías de su país.
Ambos se necesitan, ella para presentar un novio ficticio a su familia, y él para introducirse en la red de contrabandistas a través de la familia de ella.
El libro está lleno de muchos personajes secundarios con personalidades muy dispares, el abuelo, patriarca de la familia, un personaje que controla todo lo que sucede a su alrededor. Las tías Lydia que ha sido como una madre para nuestra protagonista y Beryl metomentodo y cotilla por naturaleza. Y sus primos: Anthony que ha sido para ella el hermano que nunca tuvo, Bertram el típico dandi, y Harold el vicario santurrón.
Desde mi punto de vista es un libro muy entretenido, en el que no falta la intriga, la traición, la desconfianza, los enredos y como no el amor.
Mi puntuación 3.5