Carly se ha divorciado y después de un tiempo decide cambiar de vida, lo que incluye trasladarse junto con su amiga Sandra a la población donde vivió su niñez y adolescencia, para empezar un nuevo negocio. Lo que no esperaba es reencontrarse con su primer amor Matt Converse, y recordar todas las razones por las que debe seguir apartándose de él.
Matt es ahora el sheriff del pueblo, nada que ver con el joven que recuerda Carly. Matt tiene un sentimiento de cariño muy profundo por esta chica a la que conoce desde que ambos eran unos jovenes, en cierto modo es para él, como una hermana. Y es evidente que existe atracción entre los dos; pero ¿dejará él, que esa atracción pase a un plano más fuerte?.
Pues bien, el argumento prometía, SI. El comienzo está muy bien, hay escenas francamente divertidas.La protagonista se sale un poco de los canones que venía observando últimamente :chicas buenas, sin malos pensamientos, sin un gramo de maldad en su cuerpo, que aceptan las cosas con tranquilidad, que no se enfadan, o al menos no lo parece. En resumen, que necesitaba encontrar una protagonista de carne y hueso, alguien más creíble, y ¿porqué no?, con defectos. BINGO la tenemos, la escritora logra que Carly parezca la vecina de enfrente, que se enfada, que tiene momentos malos, en fin una mujer normal. Sin embargo todo eso se hace cansino, tantas vueltas que la chica le da al tema de su amor/desamor por Matt, "ahora quiero, ahora no"; el que parezca que no ha superado su adolescencia, que insista en comportarse de una forma, cuando desea lo contrario, aburre.
Matt es un personaje masculino que me dió la impresión de no tener claro lo que quiere, incluso parece que está forzado a tomar decisiones. En determinados momentos trata a Carly como un "bicho molesto", y es casi como si se sometiese a la voluntad de ella, dejando la suya a un lado. A mí esto no me gusta, desinfla la historia, elimina la química entre los protagonistas, vamos que pintaba bien la cosa y la fastidian.
A medida que avanzaba el libro me aburría más y más, tenía la sensación de que muchas de las páginas no eran necesarias, estaba deseando llegar al desenlace, ¡¡¡qué tostón!!!. Lo confieso, me he saltado algunos párrafos.
Si tuviese que poner puntuación, atendiendo a los primeros capitulos, le pondría un notable, por mostrar personajes de carne y hueso, con defectos , que podrían representar a cualquier persona; pero como he leído el libro completo, lo definiría como "prescindible", para matar el rato y poco más.
La historia de intriga tiene bastante trasfondo, y en principio despista, porque uno no imagina a donde quiere llegar la escritora, pero no consigue enganchar con esta historia secundaria, parece más bien un relleno.
Los secundarios, "divertidos" y temo que con un desarrollo muy pobre. Demasiada rapidez al arreglar las cosas. Esperaba algo muy diferente después de "Un solo verano".
Sé que este libro está entre los preferidos por las seguidores de Karen Robards, pero a mí no me ha llenado.