Crítica La sumisa insumisa (No leerla si vas a leer el libro)

Genial, Alex lo hiciste bien olé tu arte. ¿Porqué me digo esta lindezas de entrada? Fácil, por esa ceguera que en ocasiones nos cocina a la forma de una masa irreconocible por nosotras mismas. Vamos al grano que si llego a leer lo que os he subrayado arriba tal como se promocionaba en la editorial, ni título ni curiosidad ni ocho flautas. Yo no sé en qué estaría yo pensando… vale sí lo sé pero no es cuestión de abrirme yo en canal, cuando lo que pretendo es diseccionar esta novelita de amarras.

A esta grata y divertida señora no tengo el gusto en conocerla, ojo esto no va con retintín, pero si me choca el que haya podido ganar un premio con dicha novela, los otros premios como no los he leído me son completamente indiferentes y más cuando tampoco pienso leerlos. Por lo tanto solo tengo la vaga idea de lo que me pueden decir para promocionarla, ah que ilusa yo de no haberme percatado antes de esto. En fin vayamos por su correspondiente camino he ir contando las peripecias de cómo llegue y como he salido escaldada.

Mi llegada hacia el encuentro fue la curiosidad del título, por todos los santos ¡claro que con ese nombre y conociéndome, tenía que leerlo! Me creaba no solo curiosidad sino también el deseo de aprender varias cositas que ocasionalmente fueran divertidas a la hora de soltar un “No picaron” definitivamente estábamos en el momento justo. Sí, era el momento aunque no podría decir lo mismo de la compañía, en el primer capítulo me aburrí. Era un quiero y no puedo con muchas divagaciones para no llegar a ningún punto en concreto, un caos frenético que no tenia pies ni pauta y sobre todo soporífero. Bueno, bueno algunas veces a los amantes hay que irles diciendo que han de hacer, ya se sabe esa primera vez con la tensión de “estaré a la altura” vayamos a por el segundo asalto. Comenzaron las sonrisas y risas, es curioso pero una cama sin ellas no es un recuerdo para retener en la memoria, de qué modo llegaron, del mas facilón pero en este punto eran gratificantes, esos recuerdos del cualquiera que lleve años con un PC, sus Chats sus IRC. Y mirad que siendo sinceras a mí me han soltado más burradas que a la protagonista, aunque eso no quita para reírme un ratito, haciéndonos participes a las dos de un mundo bastante complejo, loco y fantasioso. Ya bueno… esto ha sido lo mejor. Y me vi otra vez mirando a la pared o las uñas esperando que el hombretón de turno terminara su quehacer, reteniendo las ganas de levantarme y echarle directamente como dios le trajo al mundo a la calle, no se merecía otra cosa, pero soy mala no malita.

El mundo del IRC está plasmado muy bien, pero que ella que se la da de sabia por la vida, analizando a las personas por su forma de escribir o no en esa pantalla y chat etc. que se vanagloria cada día de su agudeza verbal y mental. Cuando a la hora de la verdad y está en situaciones de una vida normal me habla y utiliza la expresión como si estuviera otra vez en una sala, pues que os digo al saco con ella. La segunda vez que la meto en el saco es cuando se quiere hacer la graciosa y con juegos de palabras que más de una mujer adulta parecen de niñas de guardería. Hasta aquí ni veo dominación, ni sumisión ni insumisión, mucho menos a ese Amo que debe ser la quinta esencia de la vida, que desilusión la mía. No he visto una dominación ni nada parecido solo algo muy edulcorado fácil con un vocabulario fuerte, cosa que eso no hace ser sometida, siendo un erótico tampoco me ha dado la satisfacción de hacer que algunas mariposas saltaran, no espero que me humedezca seamos claros pero sí que me provoque un algo, aquí nos entendemos todos ¿verdad? La tercera y última es cuando por arte de magia pasa de lo que ella llama insumisión y yo digo no os digo que calificativo le he dado a la sumisión pretendida, ¿perdón, disculpa? Volvamos a los capítulos atrás igual yo me he perdido esa potencia de dominación, reviso, vuelvo a leer el párrafo, ¿me faltara algo del libro? ¿Seré tonta yo? Paso a leerme parte otra vez y sigo sin ver donde puñetas esta un hombre fuerte que sepa dominar con una sola palabra entrando un morbo y un deseo que te apabullan con o sin palabras sonoras. ¡Con dos pares oye, que no lo encuentro! Tenía tantas ilusiones en ese hombre por muchas razones y por el morbo que da, en fin globo inflado con antelación ya sabemos que luego pincha sin satisfacción. Azuquita viva.


En fin, el remate final lo regala o bien me lo vomita, llevándola a una mazmorra, donde no solo le dan con la fusta por finnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnn, algo de sangre y acto seguido para que no llore ni se sienta afligida se regodea de placer con otra sumisa, ¡por favor! Y antes de investirla vamos, vamos, que esta mujer ha pasado penurias pobrecita ella al ser sometida por un amo farolillo, termina en cantada, en esa mazmorra con otra boquita de pitiminí para luego quedarse a dos velas cuando pasan de ella y se lían los otros tres, digo yo no era un cuarteto como se ha quedado en trío. Qué poco le gustan a estos el sexo de verdad. Para que relatar el final, vayamos diciendo que con ánimos de poner ya todo más romántico y rosa pastelito de merengue el amor sale a la luz. Sí, señor con buen criterio y yo me lo creo.
Y a mí no me ha espantado nada, me aburrí como yo sola esperando algo más que nunca llegaba, cuando leo sobre Dominación y sumisión quiero eso y no que me engañen. Que para aprender o curiosear están mejor preparados algunos blogs que estas páginas terminadas, porque a fin de cuentos, eso es lo que me ha contado un famélico cuento malo.

Sin pies ni cabeza, mal escrito, mala trama malos diálogos. Aps y no le pongo la mayúscula al amo por no se la merece.

No me tires de la lengua que estoy cabreada aun, la verdad es que me he cortado mucho a la hora de expresarme o decir más concienzudamente. Pero vamos creo que se me ha entendido aun con la coletilla de en fin XDDDDDD. En realidad yo en erótica no busco el humedecerme, exijo como alma que muerde al diablo, esa sensación de “Yo necesito hacer eso o aquello”.

Un besote.