Crítica: La dalia azul.- Nora Roberts

Stella, Rosalind y Hayley son las protagonistas de la nueva serie de Nora Roberts, la Trilogía del Jardín. Las tres se encuentran en un momento incierto de su vida, donde quieren dejar atrás el pasado y mirar hacia el futuro con alegría y esperanza. Compartirán vida, trabajo y casa; un viejo caserón a las afueras de Memphis que lleva incluido el fantasma de una mujer, de la que nadie sabe su nombre y que se aparece por las noches para velar el sueño de los niños.
Las tres trabajan en un próspero vivero propiedad Rosalind. Juntas se apoyarán a la hora de rehacer sus vidas.

En este primer libro Dalia Azul, Stella vive feliz con sus dos hijos y su marido en Michigan, hasta que un día se estrella el avión en el que viajaba éste y su mundo da un giro de 180º. Se siente perdida, no sabe que hacer…….. y después de mucho pensar decide dar un cambio a su vida. Vende su casa y se marcha al lugar que la vio nacer, a Memphis, donde todavía vive su padre junto con su madrastra.

Allí llega Stella con muchas ilusiones y muchos nervios a pedir trabajo en el vivero de Rosalind, ésta tras la entrevista, decide darle el empleo de directora del vivero, poniéndole como condición que debe de vivir en su casa.

También aparecerá en escena Hayley, una prima lejana del primer marido de Rosalind, que se encuentra sola y embarazada. Hayley llega a la mansión buscando un futuro para ella y su bebé.

La chispa entre nuestros protagonistas, Stella y Logan, salta desde su primer encuentro. Ella es la directora del vivero y le encanta el orden, él es diseñador de paisajes y odia el orden. Son la cara y la cruz de la moneda, ambos llevan un matrimonio a cuestas y ninguno tiene interés en enamorarse.

El libro no llega a ser de los mejores de la autora, aunque si me ha gustado bastante. En este primer libro de la trilogía nos presenta a los personajes que irán a pareciendo a lo largo de los libros siguientes: Rosalind y Mitch, el doctor que va a investigar en el pasado para ver quién es el fantasma que mora en la casa, Hayley y Harper, el hijo de Rosalind que también trabaja en el vivero y David, amigo de Harper que se ocupa de que todo funcione en la casa.

La relación entre nuestros protagonistas me ha gustado mucho, él desde un primer momento se da cuenta de que se ha enamorado de Stella y no lucha contra ese sentimiento. Ella en cambio si que lucha con todas sus fuerzas, tiene miedo al amor, y también siente miedo por sus hijos, no quiere enredarse en una relación que si sale mal pueda dejarles marcados, como quedó ella con cada relación que tuvo su madre. Además su primer amor fue sereno y tranquilo, y el amor de Logan le hace sentir cosas que nunca había sentido.

Mi puntuación un 4.